6 hábitos que mantienen el dinero en tu bolsillo

El mes todavía está en el comienzo y, creemos, ya debe haber planeado a dónde irán o seguirán cayendo sus ingresos o salarios recibidos en su cuenta bancaria hasta el próximo día 30.
No hay duda de que, aun considerando lo que ya cuenta haber recibido, su expectativa es que su dinero tenga la mayor longevidad posible, por corta que parezca en los próximos días.
Si esto te ha estado sucediendo con cierta frecuencia, tal vez sea hora de revisar algunos comportamientos o incluso pensamientos que pueden estar perjudicándote en la forma en que tratas tu propio dinero.
En este texto enumeramos seis hábitos necesarios para que, puestos en práctica, puedas ver una nueva perspectiva financiera que, además de preservar, pronto pueda hacer prosperar tu presupuesto personal o familiar.
1 – PRESUPUESTO EN RIESGO
Quien quiera tener suficiente dinero para terminar el mes necesita tomarse en serio una actitud que prescinde de todas las demás: cumplir estrictamente con la planificación presupuestaria. Ningún plan puede resistir el uso desenfrenado del dinero.
Así que, antes de imaginar trucos para mantener tus finanzas en orden, empieza por la práctica asidua y rigurosa de lo básico: ceñirte a tu presupuesto. ¿Pueden ocurrir imprevistos? Sí. Mientras tanto, haz tu parte.
2 – OBJETIVOS CLAROS
Al escribir el presupuesto del mes, enumeramos los ingresos disponibles o anticipados junto con los gastos fijos y variables. Entre una cosa y otra, también anotamos nuestras metas y sueños, sean los que sean.
En este punto es necesario ser lo más específico posible. Ejemplo: ‘viajar a Estados Unidos en las próximas vacaciones’. Especifique el monto a gastar, el método de pago, etc. El impacto en el presupuesto debe ser claro.
3 – POR DEBAJO DEL LÍMITE
Dependiendo de los ingresos que consigamos sumar al presupuesto, nos enfrentamos a dos realidades diferentes: la necesidad de hacer que el dinero dure hasta final de mes o la posibilidad de gastar lo suficiente.
En cuanto a esta segunda opción, los que tienen este privilegio, si podemos llamarlo así, pueden bajar un poco más la regla de gasto para que puedan ahorrar el resto. Evalúa tu nivel de vida y adáptate, si es posible, a él.
4 – MAYORES INGRESOS
Si no hay mucho espacio económico para hacerlo ahora, las alternativas más prácticas para este objetivo son dos: reducir tus gastos o trabajar para que tus ingresos puedan ser mayores.
Cuando te proponemos el trabajo que más gana, nos referimos al tuyo, ya sea por un ascenso, trabajo extra o ganancia inesperada (lotería, herencia, etc.) y también al propio dinero que, al invertirlo, se multiplica (o trabaja) por ti.
5 – GASTAR MENOS
He aquí un hábito que contribuye decisivamente a la salud de tu presupuesto. Pero, dada la difícil realidad económica que vivimos en Argentina, es todo un desafío retener dinero para los distintos gastos diarios.
Aun así, es posible ahorrar, sobre todo en lo que podemos marcar la diferencia a final de mes. Duchas más rápidas, dispositivos electrónicos desenchufados y uso controlado de gas ayudan a reducir las facturas de servicios públicos.
6 – SABER INVERTIR
Como se mencionó anteriormente, es posible que su dinero pueda ‘trabajar’ para usted siempre que su preocupación sea con la cantidad que ya recibe, necesita o busca para cumplir con cada mes de su presupuesto.
Entonces, aprende a invertir. Conocer el mercado financiero y sus productos y servicios. Identifícate con aquellos por quienes puedes comprometer una parte de los ingresos pensando en futuras y mayores ganancias.
Felices los que ‘descubrin’ lo antes posible la capacidad del dinero no sólo para satisfacer sus necesidades sino también para generar y acumular riqueza. Que lo digan los ricos. ¡No pierdas más tiempo y únete a ellos!