¡Aleluya! ¿Vas a organizar tus cuentas?
Después de tanto tiempo cuidando tus cuentas personales como querías o podías, sucedió que, finalmente, decidiste que lo mejor que podías hacer era cuidar bien tu dinero, a tiempo para que te arruinaras definitivamente.
Si tu decisión sucedió este sábado, ¡aleluya! Con perdón, por supuesto, por el juego de palabras con el nombre dado a la víspera de Pascua. ¡Y es realmente algo para celebrar, porque es un presagio de la resurrección financiera!
Cuestiones religiosas aparte, por las que tenemos nuestro respeto, lo que llama nuestra atención es su disposición a dejar atrás un pasado marcado por la dejadez con su propio dinero, de cara a una nueva era.
Si eso es lo que desea, consulte nuestros 7 consejos a continuación para reorganizarse financieramente y seguir un camino más seguro a partir de ahora. ¡Con disciplina y fe, puedes llegar a donde quieras!
- PRIORIDAD: EDUCACIÓN
Lo primero que debes valorar ahora mismo es el conocimiento. Fue por su ausencia que, quizás, te golpeaste tanto la cabeza cuando tuviste que solucionar tus problemas económicos.
Así que no pierdas el tiempo: estudia. Dedícate a conocer más de finanzas, en todas las áreas que puedas o quieras. Aproveche nuestro contenido gratuito publicado diariamente aquí para mantenerse actualizado.
- ORGANIZACIÓN
¿Cómo has estado controlando el uso de tu dinero? ¿Solo con el saldo del extracto bancario? ¿Dónde están tus notas? Si aún no tenía la costumbre de registrar todo, ¡arréglelo hoy!
Y no hay ningún secreto. Solo haz una hoja de cálculo, ya sea en la computadora o en tu cuaderno, donde estén todos tus gastos a la izquierda y los gastos a la derecha, con las restas de cada pago. Haz esto y no te perderás.
- AHORRAR
Además de tener a la mano una planilla de presupuesto, otra actitud obligatoria para quien quiere tener sus facturas al día es el compromiso de ahorrar. Es decir: solo gaste menos de lo que puede ganar.
Este tipo de iniciativas te ayudan, y mucho, cuando te encuentras ante llamamientos promocionales que, ya sabes, te joderán el bolsillo. Y a pesar de eso, ve allí y compra. Pero ya lo sabes: no te pases de la línea presupuestaria.
- OBJETIVOS
Piénselo: ¿su decisión de reorganizar su vida financiera de una vez por todas tiene algún propósito? ¿A cambio de qué estarías dispuesto a someterte a un tiempo de disciplina y sacrificio?
Por eso es necesario enumerar objetivos, desde los más simples hasta los más complejos, para que tu viaje sea estimulado por los sueños. Si no lo hace, pronto estará desmotivado y listo para volver al punto de partida.
- RESERVA DE EMERGENCIA
Mientras reorganiza sus cuentas, reserve una cantidad y consérvela. De hecho, cuando aumentan las obligaciones de pago, esta distribución es más difícil, pero también necesaria por ello.
Este es un dinero que, aunque se acumule poco a poco, puede ser de gran utilidad en cualquier momento. Con el tiempo, acumula suficiente dinero para deshacerse de los préstamos y los intereses.
- DEUDA CERO
No puede imaginar ninguna perspectiva de control financiero (ni ninguna esperanza de prosperidad) si permanece endeudado o, peor aún, asume más compromisos financieros.
No nos referimos aquí a los gastos domésticos recurrentes como el agua, la luz, las facturas de internet, etc., sino a aquellos que prefieres hacer a tiempo que podrías pagar en efectivo. Piense en eso.
- INVERTIR
Saber administrar tu propio dinero es el sueño de muchas personas. Y, como bien sabrás, y has visto hasta aquí en este texto, lo único que necesitas es suficiente disciplina para terminar la semana o la semana con un balance positivo.
Lo que suceda a partir de esto, para mejor, depende de su iniciativa y capacidad para invertir. La iniciativa depende de la posibilidad financiera que tengas disponible y la capacidad de conocer los diferentes mercados.