¿Cómo ahorrar en el uso del aire acondicionado?
El domingo amaneció nublado en la capital argentina. Según sitios web especializados en meteorología, es posible que esa bucólica llovizna caiga, ya sea por la mañana o por la noche. Día ideal para tomar esa siesta, para los que están en casa.
Durante los próximos y primeros días de febrero, sin embargo, la temperatura promete subir los termómetros, siempre según las mismas plataformas, acercándose a los 30 grados. Entonces, ¡aquí viene el calor!
Con la vista puesta en las variaciones climáticas, las tiendas aprovechan para colocar productos para afrontar los días más calurosos, ya sean simples agitadores de mano, varios modelos de ventiladores o los tan deseados equipos de aire acondicionado.
En cuanto a esto último, en este texto trataremos algunos consejos para ahorrar en la compra y uso de estos ‘villanos’ de la factura de la luz. Compruébalo, practica y refresca tu cuerpo y tus finanzas personales.
¿CUÁL COMPRAR?
Si todavía no tienes aire acondicionado en casa (asumiendo que vives en una región donde es necesario o incluso indispensable) es hora de prestar atención a algunos detalles para empezar a ahorrar en la compra.
- Tamaño adecuado: el dispositivo debe ser compatible con el tipo de espacio donde se desea instalar. Esta duda se puede resolver con la visita de un profesional especializado.
- Tipo de modelo: elige entre el que te garantice una mayor estabilidad de enfriamiento, tenga control por internet o que además tenga la función de calentar ambientes (Patagonia, allá vamos!)
- Eficiencia x consumo: observe cuánta electricidad demandará el dispositivo para entregar lo que se anuncia. En este contexto, evaluar si el precio propuesto compensa el gasto
Aún en cuanto a los valores, es importante prestar atención a las promociones. Es en este punto que puede ejercer su poder de consumidor y negociar condiciones aún más favorables para cerrar el trato.
¿CÓMO USAR?
Como ya informábamos al principio de este texto, el aire acondicionado es uno de los principales responsables de esas facturas de luz en las alturas. La cabeza llega a hervir de susto y no hay refrigeración que solucione este tiempo.
Sin embargo, es posible adoptar algunas prácticas para minimizar los efectos de este tipo de dispositivos en sus gastos mensuales. Si no fuera así, nadie tendría aire acondicionado en casa o en el trabajo, ¿verdad? Verificar:
- Por encima de 20 grados: evite bajar más de eso. Más helado, más consumo, más caro. Simples así.
- Luces apagadas: si puede, apague las luces mientras el aire acondicionado está funcionando. La luz genera más calor al ambiente.
- Limpieza periódica: adquiera el hábito de mantener el dispositivo. Siga atentamente las instrucciones del manual de fábrica.
- Sin rayos de sol: no instales el aire acondicionado exactamente donde el astro rey encuentra su luz y temperatura. Demasiada competencia, ¿eh?
- En la parte superior de la habitación: instálelo mucho más cerca del techo que del suelo. Siga la guía de un profesional especializado.
- Aire encendido, ambiente cerrado: no tiene sentido enfriar el aire que entra y sale por la ventana abierta. Puro desperdicio de refrigeración y dinero.
- Lo usé, apáguelo: el aire acondicionado no funcionó en todo el día. Se congeló, apágalo. Incluida la salida.
CREATIVIDAD ADICIONAL
Además de seguir todas las pautas anteriores, aún es posible ahorrar un poco más de ‘estrategias’ generadas por la experiencia de usuario asociada a la creatividad popular. ¡Lo que no haces para mantener unos cuantos dólares más en tu bolsillo!
- Aire acondicionado + ventilador: mientras el primero enfría el aire, el segundo lo esparce. ¡Piense en una asociación eficiente!
- Aire acondicionado + hielo: colócalo cerca del aparato y te ayudará con tu servicio de refrigeración. ¡Tu factura te lo agradece!
- Aire acondicionado o climatizador: prefiere el segundo, a tiempo para que el primero se vuelva indispensable debido al clima cálido
Y AHÍ, ¿TE GUSTA?
Esperamos que estos consejos hayan refrescado tus ideas, ya sea para comprar o mantener un aire acondicionado. ¡De congelado, el salario del mes es suficiente!