¿Cómo ahorrar en la compra de ropa?

Atravesaste una ventana y no pudiste resistirte. Se detuvo, miró, le gustó y, cuando se dio cuenta, ya estaba llevándose otra bolsa a casa. Y no es la primera vez que esto sucede este mes, ¿quién puede decir que será la última?

Vale, comprar ropa es parte de ese paquete de necesidades que todos tenemos. A menos que residas en un campamento nudista, en cualquier momento como este tendrás que reunirte con un probador en una tienda.

Pero, ¿cómo vivir con ello gastando menos? Si es posible. Así que, quién sabe, si te ha interesado leer este texto, para que luzcas tan guapa en la pasarela como tus ahorros económicos.

¿TIENDA FÍSICA O VIRTUAL?

¡Esa es la cuestión! Esta elección a menudo marca la diferencia a la hora de pagar. Compara el mismo producto que encuentras en esa tienda de la avenida o en el centro comercial con otro en la ventana del sitio web (incluso de la misma empresa).

A menudo, será más barato aceptar la oferta en línea que aceptarla fuera de línea. Sin embargo, dependiendo de la tienda y la distancia, el pago del envío puede ser igual al valor. Si esto ocurre, es mejor recoger la pronta entrega en la tienda física.

¿TEMPORADA SIN COMPRAS?

Uno de los mayores activos para la venta de ropa es el lanzamiento de modelos relacionados con las estaciones, especialmente de invierno y, por supuesto, de verano. Esta estacionalidad suele ir acompañada de una fuerte inversión en publicidad por parte de las marcas.

Y tú, pobre mortal, tienes que lidiar con todo tipo de ‘modelos nuevos’ y ‘piezas exclusivas’ que aparecen frente a ti. Lo que no te suelen decir es que entre una temporada y otra se vacían las existencias con muchas rebajas. ¡Disfrútalos!

¡PROMOCIONES, AQUÍ VOY!

Es en este momento cuando corres el grave riesgo de encontrar ese modelo que te pareció irresistible hace seis meses, ¡pero a mitad de precio! Si te encuentras, disfruta y desfila, bella y maravillosa, con tu colección del año anterior.

Si esto le causa alguna molestia, simplemente compre el modelinho que prefiera en la colección actual y pague caro por ello. De lo contrario, no renuncies a pasar por ese estante de descuento.

ALERTA: ¡TARJETA DE CRÉDITO!

Uno de los mayores escollos de su presupuesto cuando compra ropa y accesorios puede estar dentro de su bolsillo o bolso. Se conoce con el nombre de tarjeta de crédito. ¡Expuesto a este tipo de compra, puede causar daños graves!

Por lo tanto, siempre tenga en cuenta otra regla: evite usar su tarjeta de crédito. Excepto, por supuesto, si tiene disciplina en el manejo de sus gastos. De lo contrario, ¡use una tarjeta de débito o efectivo!

COMPRAS EN ‘DÍAS HÁBILES’

La mayoría de las personas dedican, o deberían dedicar, la mayor parte del tiempo de la semana a alguna ocupación o trabajo. Suficiente gente para aumentar el flujo e incluso llenar las tiendas los sábados e incluso los domingos.

Naturalmente, en estos días de fin de semana los precios suelen aumentar, de vez en cuando, para aprovechar el movimiento. Lo contrario es válido para los demás días de la semana, cuando el caudal baja mucho.

TIENDAS Y DISTRIBUCIONES DE ACELERADORES

Hay gente que vive con dinero para todo, incluso para comprar ropa y, cuando la situación empeora, se resisten a acudir a las llamadas tiendas populares, tiendas de segunda mano y venta outlet.

Cuando el producto es bueno y la necesidad de control económico habla más fuerte, la mejor alternativa es gastar menos en la venta de ropa promovida por una entidad o por tu amiga, que inventó querer cambiar de guardarropa.

BUENO, AYUDADO?

Después de estos consejos, esperamos que tú y tus ahorros luzcan aún más hermosos. Feo es gastar sabiendo que no puedes pagar. ¡Buenas compras!