¿Cómo está la ‘balanza comercial’ de su presupuesto?

Y la balanza comercial entre Argentina y Brasil está más allá que aquí. En julio pesó 370 millones de dólares a favor del vecino país en las relaciones comerciales, nuestra mayor desventaja registrada desde junio de 2018.
La adquisición de autos, repuestos, combustible, mineral de hierro, papel, cartón y otros de la tierra de la samba no fue mayor solo porque el gobierno ha restringido las importaciones para tratar de frenar la sangría de dólares de sus reservas.
La realidad económica de un país, desde el punto de vista de sus negocios, estrategias e intereses en la adquisición de productos más allá de sus propias fronteras, puede servir como parámetro de su realidad presupuestaria interna.
¿No creen? Pues entonces analiza con nosotros, en una comparativa gratuita con procesos comunes a las transacciones internacionales, cómo podrías cuadrar tus cuentas. Después de todo, ¿está su economía personal en déficit o superávit?
ANTES, LAS DEFINICIONES…
Es necesario entender, de entrada, a qué se refieren los dos términos mencionados en el párrafo anterior, y que suelen resumir la realidad de la balanza comercial cuando se compara con uno o más países o bloques económicos.
El déficit se caracteriza cuando el monto pagado al mercado externo es mayor que el recibido. Un ejemplo es el mencionado al inicio de este texto, como balance de las relaciones comerciales con Brasil.
El excedente, a su vez, es lo contrario. Ocurre cuando hay una ventaja en la ecuación de compra y venta, para que lleguen más dólares a este lado de la frontera. Esta condición dinamiza la economía local.
Y EN CASA, ¿CÓMO FUNCIONA?
El razonamiento es prácticamente el mismo en relación a tu presupuesto, con los ajustes necesarios para que puedas entender mejor la aplicación de los conceptos a tu día a día contable.
Para saber de qué lado están tus finanzas, necesitas comparar los datos de tus ingresos con tus gastos. Si la ganancia supera el gasto, estás en déficit. De lo contrario, habrá un excedente.
Evidentemente, con fines didácticos, este análisis se refiere únicamente a las transacciones financieras mensuales y no necesariamente involucra patrimonio, lo que le da a UDS Finanzas un contenido aparte aquí.
¿CÓMO REEQUILIBRAR?
Si tu presupuesto personal, familiar o incluso empresarial es similar al de Argentina y Brasil –déficit, por lo tanto–, la solución es tomar algunas medidas para reequilibrar la balanza más hacia tu lado.
En el caso de las cuentas personales y familiares, el aumento de los ingresos está directamente implícito en la búsqueda de nuevas entradas de dinero –otro trabajo o servicio extra– y la reducción de la ‘importación’ de gastos.
En la empresa, la estrategia de recuperación consiste en la búsqueda de nuevos mercados y la reducción de los costos de producción. En ciertos casos, puede ser posible vender más y mejor a los mismos clientes, lo que ya ayuda con el balance a fin de mes.
LA BALANZA DE TODOS
Cualesquiera que sean las ‘balanzas’ de las que tenga que ocuparse a diario, es importante recordar que la calidad de su gestión tiene implicaciones directas no solo para sus propias cuentas, sino también para el mercado en el que todos hacemos negocios.
Cuantas más personas incumplan, más caro se vuelve el crédito. Cuantas más empresas sin dinero, menos capacidad de invertir en producción. Menos productos, precios más altos y menos consumo.
Al final es el gobierno federal el que lidia con el desequilibrio general, que tiene que recurrir a políticas de austeridad para poder pagar sus cuentas internas y externas, para equilibrar todo lo que paga y lo que debe.
ENTONCES, ¿LES GUSTÓ EL ANÁLISIS?
Esperamos que haya entendido qué es la balanza comercial y cómo se pueden aplicar sus conceptos a sus propias cuentas. ¡Busca el equilibrio para asegurar tu excedente!