¿Qué hacer para salvar esta Semana Santa?
Y llegó el Viernes Santo. A estas alturas de la semana, hacia el final y no hacia el principio, ya habrás decidido cuánto de tu presupuesto destinarás hasta que llegue el Domingo de Resurrección.
Después de todo, estamos en medio de unas largas vacaciones y, considerando sus condiciones financieras, o al menos la forma en que maneja su propio dinero, esto es algo que ya podría estar programado.
Sin embargo, la acumulación de estos días seguidos durante este fin de semana invita a diferentes horarios, aunque la referencia sea religiosa, como ocurre en tantos otros países.
Así que, a tiempo de que ya hayas elegido qué hacer y, principalmente, en qué gastarlo, ¡te dejamos a continuación nuestras sugerencias para que ahorres la mayor cantidad posible de tu dinero sagrado todos los días!
AGENDA RELIGIOSA
Empecemos por el horario más común estos días: el religioso. De hecho, el evento más intenso para los católicos este año, que comenzó ayer con la celebración de la institución de la Eucaristía (cuerpo y sangre de Cristo en la hostia consagrada).
Este viernes habrá festejos y procesiones. Mañana, más misas y, el domingo, la fiesta litúrgica de la Pascua, celebrada en las parroquias y demás iglesias cristianas, en virtud del calendario común.
Ante tanto ir y venir, vale la pena acordar con los hermanos de fe un santo relevo en el uso de los vehículos, para que todo el que se lo pueda permitir, incluyéndote a ti, no gaste tanta gasolina!
ALIMENTO
Aún en lo que respecta a la religión, los practicantes de la fe católica, por ejemplo, tienen la oportunidad de ahorrar al menos en el consumo de alimentos este viernes debido al hábito del ayuno.
Al menos por hoy, además de abstenerse de una comida, el almuerzo o la cena tiene proteínas de origen animal restringidas a las carnes blancas (pescado, pollo, etc.) y por tanto más baratas que las rojas.
Estos últimos, por el contrario, son los más esperados para el Domingo de Resurrección. Los asados tradicionales también se pueden comprar de forma comunitaria o grupal, de modo que el precio unitario sea al menos menos costoso.
DESCANSAR
Aunque el horario religioso también es una ‘diversión aparte’ para algunos, esta festividad es una gran alternativa para quienes quieren aprovechar el descanso del trabajo para salir, pasear o incluso viajar.
Si tu afición está cerca, no olvides llevar comida de casa (ya sea snacks, fruta o algo preparado). Es más barato que comprar en otro lado. Prefiere el transporte público disponible a poner tu coche en la calle. O ve por Uber u otra aplicación.
Si el destino está fuera de tu ciudad, aunque no muy lejos, y vas con tu vehículo, asegúrate de realizar una inspección básica completa. En cuanto al alojamiento, malas noticias: aquí estamos en temporada alta. Así que prepara tu bolsillo.
HACER NADA
Sí, existe esta opción. Una Semana Santa dedicada a no hacer nada más que lo que sería cualquier otro domingo. Aparte de las implicaciones religiosas, hay una cuestión más económica a esta condición.
Hay muchas familias en Argentina que no tienen suficientes recursos para una cena regada con un buen vino. O, al menos, la oportunidad de dar un paseo por el parque a costa del dinero del transporte que resta un kilo menos de arroz.
Sin embargo, también hay quienes deciden no estrechar la mano en el bolsillo, solo porque es feriado, y prefieren ahorrar el dinero para alguna necesidad o inversión. ¡Solo aquellos que creen en lo que planean pueden realmente lograr lo que tanto desean!
CONSEJO GRATIS
Cualquiera que sea su horario para este fin de semana, esté en buena compañía con sus seres queridos. Esto no tiene precio.