buscando cartão
site seguro

Y las compras en el supermercado, ¿cómo te va?

Actualizado novembro 29, 2022 | Autor: Rodrigo Viudes
Y las compras en el supermercado, ¿cómo te va?

Supermercados e hipermercados abarrotados prácticamente todos los días en Buenos Aires, otras capitales de provincia y otras localidades de Argentina han sido testigos de una escena insólita en las últimas semanas.

En lugar de ese intenso movimiento y largas colas, propias de los días que siguen al pago de nóminas, jubilaciones y pensiones, lo que se ha visto son ambientes, digamos, menos ‘disputados’ entre clientes y tiendas.

El aparente nuevo escenario (al menos, lo que hemos visto en los supermercados grandes y medianos de todo el país) coincide con las dos semanas siguientes al lanzamiento del ‘nuevo’ Programa de Precios Justos.

Entre una compra y otra, analizamos este cambio en el comportamiento del consumidor argentino, cuyos efectos ya fueron medidos preliminarmente, con una previsión de impacto positivo sobre la inflación de noviembre.

PROGRAMA DE PRECIOS JUSTOS

En vigor desde principios de mes, la nueva versión del programa de congelación de precios alcanzó alrededor de 1.500 productos, 200 menos de lo que inicialmente había previsto el ministro de Economía, Sergio Massa.

De hecho, en el entendimiento del gobierno, esto no sería un congelamiento, sino un alineamiento de precios con los principales proveedores mayoristas y minoristas, con derecho a reajustes mensuales de hasta 4%.

Con vigencia de solo cuatro meses -hasta marzo de 2023, por lo tanto-, el programa prioriza alimentos y bebidas en general, además de artículos de higiene personal que ofrecen las principales marcas del mercado argentino.

Como otras ‘ediciones’, el programa se caracteriza por la identificación de los productos en los lineales. El propio consumidor puede ayudar con la inspección de precios a través de una aplicación gratuita.

PREVISIBLE

Hasta que los precios fueron regulados por el programa, la rutina común de los argentinos era llegar al supermercado lo antes posible para garantizar el primer valor del día. Una verdadera carrera contrarreloj.

Ahora que se sabe cuánto costarán los mismos productos hoy, mañana e incluso pasado mañana, el consumidor argentino finalmente se queda con el ‘lujo’ de programar el mejor día y hora para ir al supermercado.

Esto solo es posible gracias a la previsibilidad que brinda el programa, que contribuye a una planificación más asertiva de los gastos mensuales reservados para alimentos y otras necesidades básicas de las familias.

Cabe recordar, sin embargo, que estos son solo 1.500 productos entre decenas de miles más que siguen estando sujetos a actualizaciones de precios prácticamente diarias, como ha sido el caso durante años.

IMPACTO DE LA INFLACIÓN

Esta ‘realidad paralela’ entre precios controlados y libres de productos puede ser la razón de la variación inflacionaria de noviembre, sondeada preliminarmente a través de una encuesta realizada por el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (CESO).

Los informes indican que la inflación debería estar entre 5% a 5.5%, lo que indicaría una desaceleración en comparación con los últimos meses. En la práctica, esto significa que el programa estaría cumpliendo su propósito.

Pero el cálculo de la inflación no se limita al consumo de los supermercados. Hasta que este mes finalice el miércoles, habrá que considerar otras variables para conocer la inflación real de noviembre.

Consideremos, como ejemplos de impacto, la eliminación de subsidios a las tarifas de servicios básicos (agua, luz y gas) y, principalmente, los reajustes en combustibles y colegiaturas (en este último caso, en la Provincia de Buenos Aires).

¿Y QUE HACER?

A pesar de los valores congelados o combinados, como se quiera, y ante los demás reajustes en los precios de los productos de servicio, que siguen muy presentes en nuestra rutina, el consumidor se queda con lo de siempre: el control de costes.

Sobre todo porque, con o sin precios considerados justos, es su presupuesto el que está en juego y debe preservarse tanto como sea posible para ‘ganar el mes’. Es un Mundial que parece no acabar nunca para el argentino.